Atrás
100 La carpa (por dentro)
A veces, entre luces, vemos la piel incierta de las cosas, la delgadez extrema del presente, la pregunta de acero que no cesa, el desconsuelo de la vida en el centro del cuerpo, que nos hace dudar si es adentro o afuera donde está el espectáculo. Si es real algo de lo que sucede en el espacio de los sentidos. No están claros los límites, los mantenemos tensos y pintados, queremos definirlos, reforzarlos, ganar seguridad en nuestro propio juego. En las noches de viento nos asusta el temblor de la lona y se hace necesaria la música estridente que, sin atenuarlo, controla el pánico por el tosco sistema de atarnos a la silla. El corazón sobrecargado se sostiene pulsando aún un tiempo más, pero sospecha que afuera -dado que adentro estamos- el vacío le espera. Y, pues no lo concibe, se pregunta cómo podrá esquivarlo.