Vas a enviar este poema.
"A mi hermano"
El dios de la mentira,
con sonrisa adorable y lógica perfecta,
excava quebradizas galerías bajo los pies del inocente
para hacerle volver a la ceguera.
Por tanto, tú renuncia a cualquier apariencia de saber
y ayuda a tus hermanos
en lo que están pidiendo,
en el dolor que sufren,
en lo precario de sus almas.
Tal vez aún no puedes, pero sabes
que esto es el camino real
que te lleva a la gloria.
Otro conocimiento
útil o inútil, alto o bajo, caro o barato, fácil o difícil
solo será veneno para tí
y extinguirá tu canto.