Vas a enviar este poema.
"La trapecista"
Si viniera esta noche la lluvia de centellas.
Si perdiera la tierra su hiriente gravedad.
Si callase un instante la música del mundo.
Si el rumor de la vida pudiera detenerse
sin detener el pulso.
Si pudieras estar, amor, siempre conmigo
y no acabara nunca de pasar aquel momento.
Si tuviera tus brazos alrededor de mí.
Si pudiera vivir solo jugando, como en aquellos días.
Si no fuera preciso mantener la voluntad despierta
y ejercitar sin pausa el equilibrio.
Si pudiera reir, jugar, dormir, dormir contigo,
descansar en tu pecho.
Si me fuera posible descansar.
Pero no estás, te has ido,
no volverás, no puedes ayudarme
y tengo que volar para encontrarte,
para llegar adonde me querías llevar.